En esta ocasión nos ha dado más tiempo, en el comienzo de este ejercicio 2024, para tener más información antes de reflexionar y sacar conclusión sobre la evolución de las exportaciones de maquinaria, equipos y productos para el sector agropecuario en los tres primeros meses de 2024.
La verdad es que los datos siguen siendo malos, como lo fueron en 2023. El año pasado cerramos las exportaciones con un 6% de reducción en las ventas exteriores y con datos al 31 de marzo de 2024, últimos datos suministrados por aduanas, la caída es del 7%. ¿A qué podemos achacar esta caída, constante y peligrosa si se mantiene en el tiempo?
AGRAGEX diría que hay muchos factores negativos que influyen en las malas ventas. El detonante fue claramente la aparición del Covid-19, pero cuando creíamos que sobreviviríamos al mismo alguien nos tenía preparada otra sorpresa con la invasión de Ucrania. Toda esta inestabilidad e incertidumbre provoco un efecto miedo al desabastecimiento y, por tanto, un acopio de máquinas, recambios o materias primas por parte de los importadores y distribuidores extranjeros y nacionales también.
2020, 21 y 22 fueron años de bonanza para muchos fabricantes, a pesar del alza de los precios en materias base como el acero, los combustibles, los transportes o las materias primas de los fertilizantes y los productos para la salud y nutrición animal… Indudablemente, las ventas fueron de más a menos y al final las constantes subidas provocaron un efecto de agotamiento y las ventas se pararon. El cliente final ya no aceptaba más subidas en los productos o en los fletes porque el mercado ya no se lo iba a pagar. El efecto resultante en 2023 fue la reducción progresiva en las ventas que quedo maquillado, de alguna manera, por los altos precios aplicados, pero ya en 2024 esta fórmula no es válida y los resultados son realmente malos. Malos al punto que algunas empresas han empezado a aplicar eres temporales en sus plantillas por el colapso de sus ventas.
Pero la crisis no está solo en España. Es más, la situación es peor en el resto de Europa y las exportaciones al continente se han caído un 9,5% en los primeros 3 meses del año, destacando Francia con un 16%, Italia un 17% o Portugal un 7% menos en sus compras de equipos españoles.
Los agricultores no están siendo bien tratados al exigírseles unos trabajos que nada tienen que ver con la agricultura o la ganadería y creemos que su trabajo debe ser respetado y valorado en su medida. La burocracia debe ser más racional y aplicarse con ese sentido común que tanto echamos de menos en los últimos tiempos.
Debemos de ser conscientes que el empacho sigue activo y que necesitaremos todavía de tiempo y mucho bicarbonato para digerir estos “fastos” pasados y así afrontar el futuro con fuerzas renovadas y muchas ventas
